Palacio Ducal de Gandía (VII): Leonardo da Vinci, Maquiavelo y César Borgia
DÍA MUNDIAL DEL ARTE
"Camino Borgia" (VII) .
Leonardo da Vinci, Maquiavelo y César Borgia.
Hoy se cumplen 570 años del nacimiento del genio, maestro,
polímata florentino del Renacimiento Italiano. Leonardo da Vinci. Nació el 15
de abril del año 1452 en Vinci, Italia.
Su nacimiento es, considerado desde el año 2012 como el día
mundial del arte.
En vida fue pintor, anatomista, arquitecto, paleontólogo,
artista, botánico, científico, escritor, escultor, filósofo, ingeniero,
inventor, música, poeta y urbanista.
“El aprendizaje nunca agota la mente”.
Leonardo da Vinci.
Hoy recordamos su pasaje con otros dos personajes históricos
que cruzaron sus vidas: Leonardo, Maquiavelo y César Borgia.
CESAR BORGIA: EL PRÍNCIPE DE MAQUIAVELO.
Corría el año 1499 cuando César
Borgia estaba en la cima de su éxito como estratega militar. Ese año tenía
planeada la conquista del centro de Italia y para ello comenzó su campaña militar,
más ambiciosa hasta la fecha que le llevaría varios años. Tres años más tarde y
por razones militares, mantendrá su primera reunión con Maquiavelo. El
ejército de César Borgia venía victoria en victoria hasta llegar a las
mismísimas puertas de la gran ciudad de Florencia. En estas circunstancias, la
ciudad de Florencia decidió enviar a parlamentar con César Borgia y eligió para
ello al astuto diplomático Maquiavelo, con el encargo de negociar el mejor
acuerdo posible para la ciudad que anhelaba un pacto de no agresión. A pesar de
estar en bandos opuestos y todo lo que representaba la figura de César Borgia,
pero como rival para Florencia, Maquiavelo quedó fascinado desde un primer momento
por la figura de César Borgia. La manera que tenía de ejercer su poder, sin
cortapisas, directo, a veces agresivo y a veces benévolo encandiló a Maquiavelo.
Disertó la figura de César y tuvo claro que así es como un príncipe debía ser.
A partir de ese momento no lo vio ya como un rival. Pero una cosa es la
mentalidad de Maquiavelo y otra la mentalidad del propio César, precisamente
porque se sabía fuerte, con un gran ejército, con el respaldo de su padre, el
sumo pontífice “Alejandro VI”, era casi invulnerable. Por ello, no tenía César
en mente bajo ningún concepto perdonar a la ciudad de Florencia solo a cambio
de algunas migajas, unas vagas promesas de lealtad de una ciudad que se sabía
que a la mínima cambiaría de bando y algo de dinero. Su exigencia fue primero
desconcertante, quería apropiarse de un símbolo de la ciudad, renunciando a
pedir más dinero, eligió la vía de apropiarse de lo más valioso que había por
entonces en la ciudad y que le resultaría de gran utilidad en adelante. Hablamos
del propio Leonardo Da Vinci. Este hecho terminará de encumbrar al ya famoso
Leonardo más allá de los límites de Italia. Ahora César disponía de una gran
mente que acompañara a sus ejércitos, el mejor ingeniero que existía en su
época. Su ingenio militar, dotado de tan portentosa imaginación, será el arma
más eficaz para continuar con su campaña expansionista para pesar de sus
contrincantes.
Bajo las órdenes de su nuevo mecenas, César Borgia, (al que retrató en un dibujo), Leonardo se dedicó a realizar gestiones como ingeniero militar, realizando mejoras en las fortificaciones de César Borgia, diseñó piezas de artillería, fundamentales cada vez más en los asedios y batallas, catapultas, e incluso, una máquina nueva de asedio que permitía, de una sola vez, hasta trescientos hombres sobre casi cualquier muralla. Pero la mente de Leonardo no se detuvo ahí, también diseñó submarinos, tanques, helicópteros y calculadoras, aunque la técnica de construcción, por aquel entonces no estaba aún lo suficientemente avanzada. Toda esta actividad enfocada en la guerra pesó mucho en el pacifista Leonardo, su desasosiego fue en aumento, a ello se sumaba su desencantado con la crueldad del ser humano y la guerra que no parecía tener fin.
Mientras, Maquiavelo estuvo en
Roma, con misiones diplomáticas en las que debía permanecer largas temporadas
en la corte de Alejandro VI, padre de César Borgia. Esto permitió a Maquiavelo
ir teniendo un contacto cada vez más cercano a César Borgia y a Leonardo da
Vinci. Con César lograba sintonizar por sus sutiles disertaciones, análisis
políticos. Con Leonardo da Vinci pudo pulir su perspectiva científica sobre el
mundo. Según especula Paul Strathern, en el artista, el filósofo y el guerrero
pudo haber influido en el regreso de Leonardo da Vinci a Florencia el 18 de
octubre de 1503, en un nuevo contexto político en el que el nuevo papa Pio III (Alejandro
VI murió el 18 de agosto de 1503 y César Borgia vio como de la noche a la
mañana su poder iba menguando cada día), quería aproximarse a la ciudad-estado
y su hijo consintió entonces desprenderse de él como gesto de buena voluntad.
Autor: Jose Mª Maestre Domínguez ©
Fotos : Wikimedia Commons. Attribution-ShareAlike 4.0 International (CC BY-SA 4.0)
Comentarios
Publicar un comentario