El Desconcertante Enigma del Huevo de Asuán: ¿Pistas Ocultas sobre las Pirámides de Guiza en Egipto? 4000 a.C.
El desconcertante enigma, y las dudas de los egiptólogos, por el huevo de Asuán: La duda, ¿Es una representación ancestral de las pirámides de Guiza con 5.000 o 6000 años de antigüedad?
Unos misteriosos grabados sobre la superficie de un huevo de avestruz, que fue hallado en una tumba cercana en Asuán, y que se pueden visitar en el cercano Museo Nubio de Asuán, sección de Prehistoria en Egipto. Este objeto decorativo singular podría desmontar la actual cronología que se tiene consensuada por los egiptólogos sobre la antigüedad de las pirámides de Guiza en torno al 2.650 a.C., . Este huevo de avestruz tendría una datación que nos llevaría desde finales del 4000 a.C., hasta mediados del año 3000 a.C., y en el que se adivinan, entre otros elementos grabados en su superficie, lo que algunos egiptólogos afirman que podrían ser las tres pirámides de Guiza. Motivo por el cual, levantó un especial interés entre la comunidad científica, dado que, de ser cierto, estaríamos hablando de una cronología en la que las pirámides serían, al menos, 1500 años más antiguas de lo que se presuponía.
En este artículo, vamos a desentrañar las diferente hipótesis que desmontan tal afirmación.
No obstante, hay que indicar que el uso de huevos de avestruz en regiones cercanas, está atestiguado desde el año 7500 a.C., cuando en una excavación al sur de Israel, entre las dunas de arena de Nitzana, pertenecientes al desierto de Negev, se descubrieron diversos objetos prehistóricos, entre los que destacarían 8 huevos de avestruz en un campamento nómada, entre los restos de una hoguera donde fueron cocinados.
Los huevos de avestruz están datados en la zona hasta el siglo XIX, Sus cáscaras no solo se utilizaban como elementos ornamentales, sino también funcionales como para realizar cantimploras o su utilización en ritos funerarios.
En cuanto al descubrimiento y cronología del huevo de Asuan
El huevo en estudio, salió a relucir en una excavación en torno al año 1910, gracias al arqueólogo británico Cecil Firth, que se encontraba trabajando en la región de Asuán, concretamente en el cementerio situado cerca de Daca, y que en la actualidad, se encuentra bajo las aguas del Lago Nasser. Los restos encontrados en las excavaciones nos trasladarían a la época de Nagada I, siendo una etapas crucial dentro de la prehistoria de Egipto, moviéndonos cronológicamente entorno al año 4000 a.C. El huevo en estudio, pertenecería a la tumba número 96, dentro del cementerio 102. Dentro de dicha tumba, que pertenecía curiosamente a un niño, fue encontrado el huevo de avestruz de Asuán. Los restos del joven niño tenían la cabeza orientada hacia el oeste, siendo una característica que ya se apreciaba en otras tumbas tradicionales, ya en época faraónica.
No obstante, las tumbas de periodo Nagada I se caracterizan en un primer momento por su sencillez y la normal escasez o ausencia de ajuar, exceptuando las tumbas de una incipiente élite que se encontraban significativamente apartadas.
La Representación en el huevo de Asuán. donde
tiene grabados claramente tres triángulos isósceles de dimensiones parecidas, así como el dibujo que podría estar representando, el margen de un río que se especula podría ser el río Nilo. Varios investigadores han visto esta representación de tres triángulos como la representación más antigua de las tres pirámides de Guiza, teniendo las pirámides, una datación aproximada entre el 2600 y el 2700 a.C., es decir, de ser cierto, el Huevo de Asuán retrasaría la cronología de las pirámides de Guiza la friolera de 1500 años, con todo lo que conlleva semejante lapso de tiempo, que supondría un agujero cronológico de 1500 años y una re escritura de los inicios de la Historia Antigua en Egipto.
El principal problema a esta hipótesis es la falta de algún texto antiguo que corroborase dicha afirmación.
El posible significado de los grabados en el huevo de Asuán según el historiador Jose M.ª Maestre Domínguez indicaría que...
"Hay que tener en cuenta, que la aparición de grabaciones en objetos decorativos similares al huevo de Asuán, abundan por todo el Mediterráneo. Lo normal, es que estas representaciones geométricas tengan un significado meramente simbólico, paisajístico o geográfico (a modo de mapa), representando con toda probabilidad, un mapa del entorno geográfico de los antiguos pobladores de la región de Asuán. Los animales que aparecen también representados en la escena, rodeando los triángulos, en el huevo de Asuán, indicarían una zona montañosa de la región.
En cuanto a los animales representados, bien podrían ser la caza habitual o la escenografía de la fauna autóctona de la zona, a modo de representación simbólica, teniendo como elementos importantes, el Nilo y una amplia variedad de animales representados, que podemos apreciar, tanto en el huevo de Asuán como en la cerámica del tipo White Crosslined, encontrada en la zona del periodo Nagada I, en torno al año 4000 a.C., nos hace sugerir esta hipótesis."
Por otro lado, la implicación de los huevos de avestruz, como parte importante de los ajuares coetáneos al Huevo de Asuán más ricos es evidente. Tenemos muestras de un huevo aplastado de avestruz en la tumba T4, del cementerio T. Otras tumbas como la U-209 con adornos en su ajuar realizados con cáscara de huevo de avestruz.
La tumba B-101, del cementerio B, perteneciente a alguien con estatus importante tenía huevos de avestruz realizados en arcilla junto a una pulsera de cuentas realizada en cornalina colocada alrededor del brazo de un niño, nuevamente una tumba de un niño con un ajuar donde aparece simbólicamente un huevo de avestruz.
Existen al menos, tres motivos por los cuales no podrían ser los grabados del “Huevo de Asuán”, la representación más antigua de las pirámides de Guiza.
En primer lugar, tal y como están representadas las posibles tres pirámides, difícilmente podrían ser las pirámides de Guiza, al formar triángulos isósceles, más parecidos en su ejecución con las pequeñas pirámides de Meroe que encontramos más al sur en la región del Sudán y que presentan una geometría más acorde al grabado del huevo de Asuán.
Segundo, hay que recalcar que las tres pirámides de Guiza no son iguales, siendo la pirámide de Micerinos la más pequeña de las tres, cosa que no ocurre en el grabado del huevo de Asuán, donde las tres posibles pirámides comparten prácticamente las mismas dimensiones.
Tercero, la disposición geográfica de las pirámides de Guiza es paralela al río Nilo y no como están representadas en el huevo de Asuán, que se encuentran alineadas perpendicularmente a un gran río.
Como posibles conclusiones diremos que,
ante la evidencias presentadas, la aparición de las posibles tres pirámides quedaría en una mera representación de tres montañas.
Una excavación realizada en 1988, muy cercana a los cementerios reales de Abidos, dieron con una tumba antigua de 5250 años de antigüedad y por lo tanto una cronología muy similar al huevo de Asuán.
En la extraña tumba encontrada de doce estancias, aparecieron unas singulares pequeñas piezas de marfil, donde aparecían representados animales como elefantes, serpientes y aves, así como árboles y montañas. Las grabaciones sobre estas pequeñas fichas cuadradas de marfil recordaba mucho a las grabaciones realizadas en el huevo de Asuán, y vendrían a indicarnos que muy posiblemente se trate de la representación de montañas.
El arqueólogo y descubridor alemán Günter Dreyer relacionó las representaciones de las grabaciones en marfil con el sistema de escritura más antiguo conocido hasta la fecha.
Según Günter, la representación gráfica en una ficha de un elefante sobre unas montañas, tendría su equivalencia con la representación del lugar donde estaban, en este caso Abidos, siendo el valor fonético del elefante (Ab) y las montañas representadas el valor fonético de (Au), la unión de ambas sílabas Ab-Yu equivaldrían a Abidos.
No obstante, algunos investigadores continúan sembrando la duda, con el argumento de la representación a lo largo de la superficie de las pirámides grabadas en el huevo de Asuán de líneas horizontales, que representarían las líneas de bloques de piedra realizados en la construcción de las pirámides.
Como vemos, las dudas están sobre la mesa de los expertos y quien sabe si nuevos descubrimientos den luz sobre este enigma.
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