GIOTTO: El Beso de Judas (1305)
Dentro de la denominada "Pasión de Jesús", la escena "El beso de Judas", es uno de los episodios evangélicos más conocidos y pintados de la Historia. En este fresco, Giotto nos da las pinceladas del "Trecento" que anticipan el "Quattrocento italiano", y con él, la llegada del Renacimiento.
Dentro de los episodios de la "Pasión de Cristo", el genial pintor florentino Giotto nos dejó alguna de las escenas más famosas de su legado pictórico en los frescos de la capilla de los Scrovegni, en Padua terminado en el año 1305 aproximadamente. La dimensión del fresco es de 200 x 185 centímetros.
Giotto completó un ciclo de frescos, donde se incluían escenas dedicadas a la Virgen y a la vida de Jesús de Nazaret. Sin lugar a dudas, el episodio de "Beso de Judas" es el más conocido.
La escena se desarrolla en Jueves Santo, momento en el que Judas Iscariote, traiciona a Jesús de Nazaret en el Huerto de Getsemaní por 30 monedas de plata mediante un beso, que era la señal convenida para saber a quién había que apresar. Traición, que por otro lado, ya fue anunciada por el propio Jesús en la "Última Cena".
Dentro del Nuevo Testamento, encontramos los episodios de la "Pasión de Cristo" narrados en los evangelios canónicos correspondientes a Mateo (capítulos 26 y 27), Marcos (14 y 15), Lucas (22 y 23) y Juan (18 y 19).
ESCENOGRAFÍA
Hay que tener claro que, a finales de la Edad Media, durante la Baja Edad Media, el IV Concilio de Letrán (1215), se establecía una iconografía muy específica sobre la figura de Judas, con rasgos físicos muy concretos como piel oscura o nariz aguileña.
Por otro lado, se establecía que la figura de Judas debía quedar en un plano inferior a la de Jesús, portando túnica o vestimenta de color amarillo que era el color utilizado para simbolizar la traición dentro de la teología medieval.
En el extremo izquierdo de la escena se observa la figura de San Pedro (con aureola) atacando con una espada a Malco, hecho que le provocará la pérdida de la oreja, para evitar el arresto de Jesús. La figura de Malco es secundaria: era uno de los siervos del Sacerdote Mayor Caifás, que posibilitó el arresto de Jesús en el Huerto de Getsemaní. Tras la herida sufrida, será Jesús quien obre el milagro y le cure la herida.
Desplazándonos en la escena hacia el lado contrario, al fondo entre las tinieblas descritas por la Biblia, en la parte superior central y derecha, se puede apreciar el enfrentamiento, que logra transmitir un efecto de confusión y tumulto entre los partidarios de Jesús y sus opositores, iniciándose dicho enfrentamiento con espadas y palos, que añaden tensión y gran dramatismo a la escena, en contraste con la serenidad de Jesús y Judas que envuelve con su manto amarillo para darle el beso de la traición.
Este modelo de lanzas como elemento de tensión y enfrentamiento, lo veremos posteriormente en otras obras como las pintadas por Paolo Uccello en "La batalla de San Romano", y más tarde por Velázquez en su famosa "La rendición de Breda".
Asociación #Laulanet
ACTAS VII CONGRESO DE HUMANIDADES. FUNDACION C.V. MARE NOSTRUM (Marzo. 2010).
Historia del arte. Tomo 2. La Edad Media. Alianza Editorial.
El Trecento en obres (TEXTOS DOCENTS). Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona.
v 2.0
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